Últimamente se nos repite hasta
la saciedad que, para una buena docencia, hay que hacer amena la materia para los
alumnos, para lo que podemos acudir a diferentes recursos. Vamos a hacer aquí mención a tres: usar la
celebración de una efeméride para explicar algo, utilizar la letra de una
canción y acudir al juego (en este caso una adivinanza). Es decir, en esta
entrada vamos a hacer un totum revolutum
de recursos didácticos o, mejor dicho, un menage
a trois de ellos, que es una idea que da más morbo y encima nos ahorramos
el latinajo.
Del primero de ellos, la
efeméride, vimos un ejemplo el martes pasado cuando Agustín nos mostró
un vídeo que montó como resumen de la Historia Contemporánea de España para sus
alumnos de segundo de bachillerato utilizando la celebración del bicentenario
de la Constitución de 1812. Sobre el uso de la música Fabio hizo lo propio con una entrada anterior en este blog que tituló Canciones educativas
aunque, como él mismo dijo, era más bien sobre canciones que hablan de forma
monográfica de algún aspecto de la Educación. Ahora, entre el señor Sabina y
yo, os proponemos la siguientes adivinanza que mezclaría canción y juego (la adivinanza) como
recurso didáctico:
Muchos la conoceréis y a los que
no, al menos, os sonará su autor, Joaquín Sabina, aunque sea por haberle
visto ponerse algo más fondón de lo que acostumbraba desde que le dio el
"marichalazo" por ciertos usos y abusos. Había pensado en alguna otra canción de la
Mandrágora cantada por Krahe que, por lo que parece, usted Agustín conoce
(sí, de usted, como bien nos enseñó Raquel que hay que hacer con las personas
mayores), pero quizá mucha de la muchachería no.
No sólo la respuesta a la
adivinanza es un personaje histórico español, cuyo ficticio funeral se describe,
sino que en la letra de la misma hay una retahíla de otros muchos
personajes históricos y conceptos que nos pueden servir de hilo conductor para
explicárselos a nuestros alumnos o para que investiguen sobre ellos, por
ejemplo, mandándoles que nos hagan un precioso PowerPoint con las 50 diapositivas
de rigor como mínimo, ¡claaaaro!.
¿Y dónde queda la efeméride?.
Pues es la primera pista para aquellos que aún no han descubierto a qué
personaje hace referencia la canción de Sabina. Así que ya sabéis, mirad la
fecha de esta entrada y ved qué ha pasado ese día entre las posibilidades que
hay para saber a quién nos referimos.
Por si acaso seguís un poco
perdidos, os añado la explicación a alguno de los versos menos explícitos de la
letra, y así aprendemos un poquito más de algunos aspectos curiosos de la Historia de España:
- Marcelino (de cabeza, marcando a Rusia un gol): seminarista
reconvertido a futbolista que en la final de la Eurocopa de 1964 marcó el gol definitivo
que dio la victoria a España sobre la Unión Soviética. El hecho fue usado por
nuestro personaje como otro ejemplo palmario de que la hidra roja del comunismo
(sic) podía ser derrotada una y otra vez por la valentía española como lo había
sido en 1939. Para que luego digan que no se pueden relacionar cosas que no tienen nada que ver entre sí si le echamos un poco de imaginación...
- El coño de la Bernarda: daría para una entrada propia. Y de hecho alguien ya lo ha hecho, con lo que remito allí para conocer una historia más que
interesante y que es reclamada incluso por Ciudad Real como su lugar de origen. Como culipardos de pro que somos (al menos adoptivos) qué menos que enterarnos.
- Brazo incorrupto de Santa Teresa: reliquia de la Iglesia Católica.
Según dicen, la "Collares" y su marido le debían tal devoción
que la tenían en su mesita de noche.
- El marqués: si Sabina no da su nombre, yo tampoco. Como ayuda, sólo
diré que el título nobiliario comienza por "Villa-", y acaba por "-verde", y aunque decían que se sacó medicina en la Complutense, parece ser que era más carnicero que otra cosa.
Su hija probó infructuosamente convertirse en estrella de baile, suerte para su Abuelísimo que no pudo ya ver cómo lo intentaba.
- José María Pemán: escritor afín al régimen de nuestro personaje
misterioso. Creó una letra oficiosa para
el himno español que pretendió sustituir al "na na na na nanananana"
de toda la vida, aunque no ha sido el único, incluido Sabina.
- Perico Chicote: dueño de un conocido bar de la Gran Vía madrileña de entonces y de hoy,
famoso por sus cócteles, que fue muy afecto a nuestro personaje. Desde su fundación en
1931 fue un símbolo de su época y lugar de encuentro de las personalidades nacionales e internacionales. En época de la República fue lugar habitual de reunión para los
falangistas.
- El Niño Jesús de Praga: es una imagen de cera de Jesucristo en su etapa infantil que parece ser se realizó en España en el siglo XVI y que
fue entregada por el embajador español al sacro emperador que la depositó en
Praga. Quizá por este motivo ha sido muy venerada en España y, con tanta monja
en el cortejo de nuestro personaje finado, hace referencia a su catolicísima
devoción.
También se nos habla de una época
de vencedores y vencido, y en tal fecha como hoy muchos de los segundos pudieron
regocijarse por fin: con los braceros de
Castellón se hace una referencia genérica a aquellos trabajadores agrarios
españoles (braceros) que sufrieron penurias durante el gobierno de este
personaje tras abolirse la Reforma Agraria de 1932. Una de las grandes
derrotas republicanas de la Guerra Civil española fue la de Brunete cuyo éxito hubiera
cambiado la contienda y, tras el conflicto, muchos españoles tuvieron que
exiliarse (los del exilio de fuera).
Pero menos se habla siempre de los "exiliados" en su propio país, quizá
porque no pueden abandonarlo y tienen que renunciar a sus ideales para poder
vivir en una tierra que les pertenece tanto como a los que buscan apropiarse de
ella en exclusiva. En el caso que nos ocupa, estos del exilio interior estuvieron obligados básicamente a dos gestos:
agachar la cabeza y levantar el brazo.
No voy a dar la solución de la
adivinanza pero, siendo francos (ejem, otra pista, no se las ponían así ni a
Fernando VII), creo que más datos no puedo ya dar…
Entrada por: ENRIQUE TORIJA RODRÍGUEZ
Si hubieras puesto etiquetas serías un autor de entradas prácticamente perfecto... como Mary Poppins. Pero no, no siendo así, quedas degradado al vulgar rango de "perfecto cachondo".
ResponderEliminarEn fin, genial.
¡Ah! Y tengo la solución a la adivinanza: Francisco Paulino Hermenegildo Teódulo Franco Bahamonde. Ahora vas y lo cascas.
ResponderEliminarAl trigésimo sexto año resucitó (Fabio)
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